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Fecha: 01 enero 2022 13:41

Hoy


Todo comienzo lleva un fin, toda mañana una noche, toda vida una muerte.
Todo se transforma, muta, cambia, cicla, se desintegra hasta sus elementales y se vuelve a integrar, se modifica, altera, desgasta, se reinventa, se re-crea.
Todo lo que está vivo va a morir, a soltar su último aliento de prana o energía vital.
La vida es hoy, es ahora.
No es lo que fue ayer, no es lo que espero que sea mañana, es esto, en este momento, aquí.
¿Cuánto tiempo y prana perdemos diariamente en pensamientos estériles, preocupaciones sin sentido, recuerdos sin futuro?
Como es nuestro prana es nuestra vida, no es cuanto vivamos sino como vivamos, en el momento presente la vida es eterna.
La mente nos saca del momento presente.
La sensación de paz es lo más cercano al presente y el presente es la maravillosa oportunidad de experimentar la vida.
No hay ayeres ni mañanas, solo hoy.
Poner consciencia en construir un hoy que nos nutra de prana, que nos de paz, que elijamos ser parte y estar presentes, que disfrutemos y nos de plenitud.
Una vez, una amiga mía me dijo “las relaciones duran lo que dura el aprendizaje”…y tal vez de eso se trate, experimentar, aprender y transmutar.

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La tendencia natural es al desequilibrio. Establecerse en Swastha, en Yoga, en Ser, unidad, armonía, salud, requiere atención plena y cambio constante. Para eso es necesario saber hacia donde no ir y tener la voluntad o el prana para redireccionar.

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